Lago Inle
16.06.2013 - 20.06.2013
30 °C
View
Vuelta al mundo
on gacela's travel map.
Los 3 días de caminata desde Kalaw concluyeron a orillas del lago Inle, uno de los principales destinos turísticos de Myanmar. El lago y las marismas de alrededor ocupan una extensión considerable y, así, el pequeño bote motorizado que contratamos tardó más de una hora en cruzar esa masa de agua y llevarnos hasta Nyaung Shwe, el mayor pueblo de la zona situado en tierra firme. Por el camino pudimos asombrarnos con los pueblos flotantes, cuyas casas se sostienen sobre pilares y donde sus habitantes se trasladan de un lado a otro en pequeñas canoas.
A pesar de que la modernidad está llegando a esta parte del mundo, el proceso es relativamente lento y los pescadores del lago todavía utilizan técnicas ancestrales en su labor diaria, para deleite de los turistas. De esta manera, después de remar hasta un lugar apropiado en el centro del lago, utilizan una de sus piernas para maniobrar la barca, mientras se ocupan de las redes con las manos. Se trata de una actividad digna de ver, ya que se requiere una habilidad extraordinaria para mantener el equilibrio y no acabar en el fondo del lago.
Por otro lado, todos los días se celebra un gran mercado en alguno de los pueblos de la zona y allí se montan los puestos, con la gente acudiendo en barca a hacer la compra. Aquí se puede encontrar de todo, hasta una farmacia en la que, por supuesto, no necesitas receta. Como en todo mercado que se precie, también hay innumerables puestos de comida para reponer energías. ¿Quién puede resistirse a un pinchito de cabeza de pollo?
La actividad más popular entre los turistas es alquilar un bote un día entero, en el que además de recorrer el lago te llevan a una serie de talleres artesanales. El primero en nuestra ruta fueron unos telares, donde las mujeres se afanaban en la confección de telas. Me dio la sensación de haber retrocedido en el tiempo unos cuantos siglos, ya que todo se hacía de manera manual. En este recorrido también nos detuvimos en un taller de orfebrería y en una fábrica de cigarrillos. Me quedé alucinada con la velocidad en la que las mujeres liaban estos cigarrillos naturales que se venden por todo el país.
Durante nuestra estancia también aprovechamos para visitar unos viñedos situados a escasos kilómetros del pueblo. El recorrido en bicicleta y las vistas desde la privilegiada localización de la bodega fueron lo mejor porque los vinos están entre los peores que he probado en mi vida. Alguno de los que catamos eran una auténtica tortura para el paladar y a punto estuve de pedir una coca-cola para mezclar.
El último día en la zona cambié de medio de transporte y alquilé una bicicleta para recorrer los alrededores del pueblo. Iba sin destino fijo, así que, cada dos por tres me tenía que dar la vuelta porque llegaba a un canal que no podía cruzar o simplemente se acababa el camino. En todo caso, me lo pasé en grande y hasta hice amistad con un grupo de chicas que estaban a pie de carretera pidiendo dinero para la renovación de un templo (sorprendentemente, casi todo el mundo que pasaba soltaba algún billete). Aunque ellas no hablaban inglés, nos comunicamos perfectamente para llevar a cabo una sesión de fotos en las que todas querían salir en la cámara con sus mejores poses. En fin, una experiencia diferente.
Mis días en el lago Inle se pasaron volando, disfrutando de la tranquilidad de la zona y del inmenso lago que condiciona la forma de vida de sus habitantes. Y del agua pasé a la montaña, ya que mi siguiente destino era la antigua estación de montaña de Pyin Oo Lwin.
PD: Como casi todos sabéis, recientemente me han hecho una entrevista en e-dreams, así que ya voy camino de la fama mundial. Si os apetece leerla, pinchad aquí
Posted by gacela 22:25 Archived in Myanmar Tagged lagos paisajes Comments (3)